Capítulo IV
Un ruido hace que nos detengamos, estamos paralizados por el miedo cuando de repente suenan la alarma a la que responde todo el cuerpo de policia de madrid que estaba en el interior del recinto seguido, una parte del ejercito español. No hay tiempo llevan armamento pesado similar al que llevamos, se abren las puertas y en un pestañeo el patio principal esta infestado de ZOMBIES veo a mujeres, ancianos, niños todo el que puediera sostener un arma estab alli librando esa batalla contra esos seres, veo a gente de alto rango como a Carlos, su amante, al comandante JORDI. Todos sueltan una rafaga de luz desprendida de sus armas incluidas las nuestras centenares de Zombies pero la batalla no ha acabado siguen entrando su número es incalculable. Pero no estaba muy centrado en la batalla ya que mi supuesto padre me dio una noticia que no me gusto, me confeso que el no era mi verdadero padre. MI PADRE ERA CARLOS, ESTABA DESCONCERTADO ANTE SUS PALABRAS AL ACABAR LA CONVERSACION NOS DIMOS CUENTA DE QUE LA GENTE ESTABA CEDIENDO ANTE LOS ZOMBIES Y EL RUIDO DE LOS DISPAROS ATRAJO A MILES DE ELLOS. Los primeros en caer fueron los niños que sirvieron de cena a esos caníbales y despues a los ancianos. La munición estaba agotándose no teniamos tiempo mis compañeros lanzaron granadas lo cual nos dio unos minutos claves para salir de ese infierno pero la policia se quedo alli conteniendo a los caníbales para mi son héroes. Pero cuando saliamos de alli vimos a Carlos, a mi padre tendido en el suelo varios Zombies se le acercaban yo y mi novia nos aproximamos pero al fijarme bien su amante estaba desmembrada y mi padre disparo a bocajarro contra los Zombies su punteria era divina acertaba siempre en sus cabezas, pero se olvido de uno...
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